25/04/2018
Durante el acto de presentación de la Fundación Iberian Live-Med Institute el Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid, José Luis Álvarez-Sala, en su participación en la mesa redonda “La educación en el grado”, denunció que el número actual de facultades de medicina es claramente excesivo. En su intervención, centrada en la educación médica desde la perspectiva de la Universidad, señaló igualmente que el número de estudiantes de medicina tiene que ajustarse a la capacidad docente real y a las necesidades de médicos del país, por lo que debe experimentar una reducción sustancial.
La Fundación Iberian Live-Med Institute fue presentada en el marco de la reciente celebración del III Congreso Anual Live-Med con una salutación de Manuel García Abad, presidente honorario de la Fundación, en el transcurso de la cual definió sus fines, entre los que destacó los objetivos de acordar convenios de colaboración con entidades públicas y privadas para el mecenazgo de la educación continuada de los profesionales de la salud y respaldar y validar, a través de su Consejo Asesor, el contenido científico de las actividades formativas.
En la mesa redonda citada intervinieron también José Antonio Sacristán, director de la Fundación Lilly y Milagros García Barbero, presidenta de la Sociedad Española de Educación Médica (SEDEM).
El primero centró su intervención en explicar lo que puede aportar un proyecto como la Cátedra de Educación Médica Fundación Médica Lilly-UCM, fundada en 2006, respondiendo a la necesidad de modernizar la educación médica aportando innovación, conocimiento basado en la evidencia y estandarización, teniendo en cuenta el elevado número de facultades de medicina, con la aportación del profesor Jesús Millán, catedrático de medicina interna, experto en educación médica. Los fines esenciales de la Cátedra son generar conocimiento en el ámbito de la educación médica, transmitirlo y aplicarlo apostando por un cambio de modelo más centrado en el estudiante pero pasando por el paciente, la humanización de la medicina. Finalmente definió las líneas de actuación en cuatro temas fundamentales: la formación, la investigación, la difusión del conocimiento y su aplicación.
Desde la presidencia de la SEDEM, Milagros García Barbero señaló que la educación en el grado ha cambiado muy poco en los últimos 40 años y no ha evolucionado en paralelo con la ciencia y las nuevas tecnologías. En España tenemos 42 facultades de medicina, un número muy elevado, lo cual hace que se incorporen muchos más médicos de los necesarios y que muchos de ellos se trasladen a los sistemas sanitarios de otros países. En relación con la Sociedad Española de Educación Médica indicó que es una sociedad científica que se está dedicando a la formación de los médicos y enfermeras en términos de contenidos y metodología. Uno de sus objetivos es ayudar a las facultades, a los profesores y a las sociedades científicas en aquellos temas de educación médica que quieran implementar, haciendo investigación en educación médica, fomentando cursos de formación de profesorado y de tutores.
En esta segunda mesa, Felipe Chavida, presidente de la Fundación IDEPRO, comenzó diciendo que la formación continuada es la herramienta fundamental de mejora continua. Ha habido un cambio de paradigma hacia el desarrollo profesional continuo (DPC), que incluye cualquier tipo de actividad que produzca ese cambio a mejor. Esta es autodirigida, de modo que el profesional tiene que estar identificando sus déficits y en función de ello dirigir su formación, incorporando los conocimientos adquiridos a la práctica. Con el DPC se incorpora la teoría educacional de adultos, la autodirección del aprendizaje y un concepto que produzca una mejora e instaure el cambio constante. En lo que se refiere a la medicina de familia, la situación ideal sería un sistema profesional implementado por la OMC y las sociedades científicas de medicina de familia, en el que la OMC garantiza el compromiso ético y una metodología adecuada de mejora continua y las sociedades científicas aseguran la adecuación de los contenidos formativos, ambas partes promoviendo la implicación activa del profesional en su proceso formativo.
Dio finalización a la mesa Pilar Fernández, vicepresidenta primera del Consejo General de Enfermería recordando que la profesión enfermera entra en la Universidad en el año 1977 como diplomatura, incorporando el grado en 1998 y más adelante con la aprobación del modelo de especialidades. En 1989 se comprobó un necesidad clara de formación así como la de crear una institución vinculada a la profesión y a la Universidad, promoviendo la creación de la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud para un total de casi 300.000 profesionales con 28 años de historia, más de 1.000 profesores y más de un millón de alumnos que han pasado por sus aulas.